lunes, 13 de agosto de 2012

Buenos Aires e Iguazu

Argentina es un país que posee una innumerable variedad de paisajes y la riqueza cultural de este país se puede observar en cada una de sus Provincias, algunas tan distintas entre sí, portadoras de un propio estilo de vida e identidad cultural. Para poder conocer el país en su amplitud se necesitan varios días y muchos vuelos internos debido a las grandes distancias que existen entre los distintos puntos turísticos. He dedicado varios viajes a la Argentina pero en ninguno de ellos tuve la posibilidad de viajar al Noreste para conocer las Cataratas del Iguazú. En mis viajes anteriores solamente pude recorrer la Patagonia y la ciudad de Buenos Aires, pero me había quedado con muchas ganas de quedarme más días en la capital para poder conocerla en profundidad. Este año me propuse volver a este país para poder viajar a aquellos lugares con los cuales había quedado con muchas ganas de conocer. Como no tenía muchos días de vacaciones, decidí viajar y quedarme la mayor parte del tiempo en la capital y realizar un viaje a las famosas Cataratas del Iguazú. El viaje desde la ciudad de Buenos Aires a Iguazú dura aproximadamente una hora y media en avión, es tan corto que ni bien uno se acomoda en el avión para el viaje ya aterriza en destino. A pesar de que el viaje es corto el cambio del paisaje es total, parece que desembarcamos en otro país. Las Cataratas son realmente impresionantes, una verdadera maravilla de la naturaleza. Recorrer el Parque Nacional Iguazú lleva aproximadamente dos días y luego de conocer y disfrutar del Parque la mayoría de los turistas optan por volver a Buenos Aires. En mi caso no fue la excepción, tenía muchas ganas de quedarme en la capital y conocerla en profundidad. Luego de arribar nuevamente en la ciudad de Buenos Aires me dirigí al departamento que había alquilado en Barrio Norte, era muy tarde en la noche y me sentía muy cansado, tan cansado que no tenía ganas de salir a buscar si encontraba algo abierto para cenar. Por suerte el dueño del departamento me había dejado una lista de delivery en Barrio Norte. Inmediatamente después de cenar me fui a la cama a descansar, ya pensando en lo que sería mi primer día en la ciudad.